Hidetsugu.

Hidetsugu (en japonés: 碑 ひ 出 で 告 つ ぐ) era un ogro o-bakemono, un chamán de Kamigawa. Vivía en la cordillera de Sokenzan en una cueva llamada Shinka. Era un maestro de la magia de sangre y fuego, y un devoto adorador del Oni del Caos que todo lo consume, por lo tanto, muy hábil para trabajar con demonios oni. Tenía una filosofía bastante simple: todo está condenado a terminar en el caos, consumido por su maestro.

Hidetsugu retenía más de una docena de oni con un juramento de sangre. Con su toque, se calcinaban las piedras. Con su palabra, ardían las ciudades.

Historia

Hidetsugu era un gobernante de su parte de Sokenzan y, como tal, ganó la atención de gobernantes similares de otros lugares. Uno de ellos era el jefe Uramon de Numai. Después de causar sus pérdidas al comerse a su gente, envió un grupo de trabajo para eliminarlo. Entre estas personas se encontraba un mago kanji, Toshiro Umezawa. El asalto no tuvo éxito y Hidetsugu mató a todos los hombres excepto a Umezawa. El mago kanji se había protegido con un hechizo que reflejaría el daño a Hidetsugu, así que lo hizo hablar y luego lo persuadió para que formara una nueva banda de vengadores, los Hyozan Reckoners, haciendo un juramento mágico de sangre y kanji.

Para tener un sucesor para su trabajo, Hidetsugu intentó entrenar a un aprendiz digno. Sin embargo, era un maestro muy severo y sus aprendices tenían una alta tasa de mortalidad por entrenamiento. Después de mucho tiempo, encontró un aprendiz digno en el ex-budoka Kobo.

Cuando Toshi llegó a Hidetsugu pidiendo ayuda para interpretar los portentos kami sobre el hyozan y el soratami, juntos realizaron el ritual que hizo que Kobo formara parte del hyozan y enviaron a su aprendiz con Toshi a Jukai. Después de que Toshi y Kobo fueron atrapados en una batalla con orochi, Kobo fue asesinado por el mago de Minamo, Choryu. Gracias a Toshi, el mago fue llevado más tarde a Hidetsugu, quien castigó al mago por uno de los peores medios imaginables: quemarlo, envenenarlo y obligarlo a comerse a sí mismo simultáneamente durante meses.

Hidetsugu prometió vengarse por completo de cualquier responsable de la muerte de Kobo, incluidos los maestros de Choryu en Minamo, sus maestros soratami de Otawara e incluso su patrón kami. Quería reclutar a un grupo de asesinos de kami yamabushi de los maestros locales. Ellos se negaron, Hidetsugu los mató y esclavizó a ocho de sus alumnos. Después de reunirse con Toshi, el ogro le contó sus planes para Minamo. Toshi pudo convencer a Hidetsugu de que se adelantara a su venganza, pero solo por poco tiempo.

Sin embargo, el temperamento del ogro no fue fácil de controlar al final. En lugar de vengarse del orochi Jukai, atacó a Minamo directamente. Allí, él y sus cazadores derrotaron a Keiga, destruyeron la Academia y mataron a casi todos los que estaban dentro, incluido Hisoka. También convocó a su patrón kami, el Oni Consumidor del Caos, para que se deleitara con el caos, la muerte y la destrucción en la Academia.

Toshi regresó a Minamo para “participar” en el proceso de venganza. Hidetsugu, insatisfecho con la participación de Toshi en la venganza, se apoderó de él y le mostró otra etapa de su venganza, desatando su ejército oni en Otawara, donde los demonios mataron a muchos habitantes de la luna. Después de una breve discusión, Toshi declaró abiertamente una guerra entre los dos miembros fundadores del Hyozan.

Después de que Toshi regresó a Minamo con otros dos hyozan, Marrow-Gnawer y Kiku, Hidetsugu fue a buscarlo con los cazadores restantes y casi lo mata. Habría matado a Kiku y Toshi a ambos, si no fuera por la intervención de Marrow-Gnawer, quien apuñaló a Hidetsugu en el ojo, invocando la maldición hyozan sobre sí mismo. Durante esta pelea, Hidetsugu, sin saberlo, desencadenó la maldición de Kiku que le otorgaron sus maestros mahotsukai. El ogro luego luchó contra Kiku, y después de una pelea brutal, la derrotó. Toshi usó la distracción momentánea de Hidetsugu y apuñaló su ojo restante.

Justo antes de destruir a Toshi, O-Kagachi, atraído a Minamo por la presencia del Aquello que fue quitado, se enfrentó al Oni del Caos que todo lo consume. Para disgusto de Hidetsugu, O-Kagachi partió en dos casi sin esfuerzo al señor oni y huyó del escenario. Desanimado, Hidetsugu le pidió a Toshi que lo transportara al templo del Devorador para vengarse de su antiguo maestro.

Después de la destrucción de O-Kagachi y Konda y la ascensión de las Hermanas de la Carne y el Espíritu, Hidetsugu emergió nuevamente, con sus ojos restaurados. Bajo circunstancias desconocidas, aparentemente se fusionó con el Devorador en un ser similar como las Hermanas, y ahora tiene las insaciables mandíbulas del oni como su pecho y estómago (cubiertos con tela). Soltó una ola de mandíbulas desde su pecho, rompiendo a Mochi en pedazos antes de consumirlo, y reclamando su alianza con las Hermanas, quienes entienden que él es parte de su mundo.