Kiku.

Kiku (en japonés: 切 き 苦 く) era una mujer de los pantanos de Numai en Kamigawa, hábil tanto en el camino del guerrero como en la magia.

“Un viajero me contó una vez que un asesino de los pantanos Takenuma usaba su magia para animar la sombra de sus enemigos en contra de ellos mismos. Un buen cuento, pero explicaría muchas cosas.”
—Diario de Azusa

Descripción

Dominaba varias armas, entre las que destacaba el hacha arrojadiza fuetsu y el abanico tessen. Sin embargo, las más mortíferas fueron sus habilidades mágicas. Usó flores de camelia púrpura que, imbuidas de su magia, pudieron excavar sus raíces a través de cualquier tejido vivo o producir un olor fragante capaz de paralizar a la víctima. Se tituló como jushi o mahotsukai, ambos términos usados para los lanzadores de hechizos de Numai.

Historia

Toshiro Umezawa conoció a Kiku durante su viaje a través de Takenuma cuando regresaba a casa de un ataque soratami. Después de su regreso a Takenuma más tarde, fue llevado por Kiku y llevado frente a Uramon. Se negó a obedecer al jefe y huyó. Kiku lideró un grupo para recuperarlo, pero con la ayuda del yuki-onna todos sus hombres fueron asesinados y Kiku y Marrow-Gnawer se vieron obligados a unirse a los Hyozan Reckoners. Trajeron a Toshi de regreso a Uramon, pero se volvieron contra su antiguo jefe en nombre de Toshi. Cuando Toshi robó la Puerta de las Sombras y se fue al honden del Myojin del alcance nocturno, Kiku decidió matar a Uramon con su camelia. Toshi regresó y antes de irse a Minamo nuevamente le aconsejó a Kiku que no trabajara para el soratami, sobre quien el hyozan había declarado una venganza.

Después de que Hidetsugu llegó a Minamo, usó a Kiku como ejemplo de como evitar el juramento hyozan al derrotarla sin sangre. Llegó Marrow-Gnawer, atraído por el juramento hyozan, y apuñaló el ojo del ogro, haciendo que Hidetsugu dejara caer a Kiku. En el otoño, el sello se rompió y la maldición la reclamó nuevamente. Toshi, sabiendo que el juramento hyozan aún estaba intacto, le impidió matar a Hidetsugu con su camelia y así invocar la maldición hyozan sobre sí misma. El ogro salió victorioso, pero Toshi aprovechó la oportunidad para cegarlo apuñalando el ojo restante.

Una vez que terminó la pelea entre Toshi y Hidetsugu, Toshi envió a Kiku a través de las sombras de regreso a Numai. Ella todavía estaba bajo el efecto de la maldición, pero el poder del hechizo estaba severamente debilitado. La última de los Numai jushi fue transportada de regreso al pantano, viva, pero se desconoce su destino.