Ganar partidas regalando tus propios permanentes siempre ha sonado más a chiste de mesa que a plan competitivo real. Comandantes como Zedruu the Greathearted o Blim, Comedic Genius mantuvieron vivo el sueño de Donate, pero casi siempre en brackets bajos. Con la llegada de Iroh, Tea Master desde el set de Avatar, el plan de “matar con amabilidad” por fin tiene un líder rápido, eficiente y peligrosamente compacto.
¿Por Qué Iroh Es El Mejor Comandante Donate Hasta Ahora?
A diferencia de Zedruu y Blim, Iroh, Tea Master se baja por tres manás, crea un Food al entrar y, lo más importante, dona un permanente gratis al comienzo de tu combate. No necesita girarse ni pagar costes adicionales, lo que permite jugarlo y empezar a regalar “bombas trampa” en el mismo turno si has curvado bien.
Cada vez que entregas algo, Iroh recompensa con un token Ally 1/1 que entra con tantos contadores +1/+1 como permanentes tuyos controlen tus oponentes. Así, la clásica desventaja de Donate (quedarte sin mesa) se convierte en ventaja: alimentas tu propio ejército mientras tus rivales cargan con permanentes llenos de texto peligroso.
¿Qué Pierdes Sin azul Y Negro… Y Qué Ganas En Boros?
Al ser Boros, Iroh no tiene acceso a amenazas negras icónicas de Donate como Demonic Pact o Abyssal Persecutor, ni a algunas piezas azules como Coveted Falcon o Thought Eater. Aun así, el color pair ofrece más herramientas de las que parece.
Cartas recientes como Stiltzkin, Moogle Merchant y Zidane, Tantalus Thief refuerzan el plan de “dar cosas con truco”, y clásicos incoloros como Steel Golem siguen siendo regalos envenenados brutales. Además, el acceso a removal eficiente, rituales rojos y herramientas de combate hace que muchas de tus donaciones se conviertan en kills rápidos en lugar de simples bromas políticas.
Combos De Té Y Caos: de mana infinito a muertes “amables”
Donde Iroh realmente se separa de sus predecesores es en el combo. Una de las líneas más explosivas es con Price of Glory y Sacred Ground:
- Turno 2: bajas Sacred Ground.
- Turno 3: casteas a Iroh.
- Turno 4: juegas Price of Glory y lo donas con Iroh a un oponente.
A partir de ahí, al girar tus tierras para maná en turnos ajenos, las destruyes por el Price ajeno, pero Sacred Ground te las devuelve enderezadas, generando bucles de maná y landfall que rematas con un Comet Storm u otra válvula instantánea.
Iroh también potencia las condiciones de victoria clásicas de Donate:
- Regalar Nine Lives para luego romperla con Shadowspear, eliminando a un jugador de golpe.
- Pasar Form of the Dragon para dejar a alguien en 5 vidas y rematarlo con burn rojo o un simple ataque.
Su rapidez al entrar y donar hace que estas líneas, que antes eran lentas con Zedruu o Blim, lleguen uno o dos turnos antes, suficiente para castigar mesas poco preparadas.
Un Nuevo Techo Para Un Arquetipo De Culto
Iroh, Tea Master no va a convertir Donate en un monstruo de cEDH, pero sí eleva el arquetipo de “regalar permanentes” a un rango mucho más respetable. Permite builds de valor político, donde entregas Howling Mines y bichos “inofensivos”, o configuraciones despiadadas centradas en combos que cierran la partida en cuanto empiezas a servir té.
Si siempre te gustó la idea de ganar dando regalos o si tus viejos mazos de Zedruu the Greathearted llevan años cogiendo polvo, Iroh es la excusa perfecta para revisitar el plan. Pocas cosas se sienten tan en flavor como matar a la mesa a base de cortesía y porcelana.
