Egon es el dios de la muerte de Kaldheim.
Egon envejece hacia atrás, su sabiduría agriada por el rencor juvenil.
Ofrece toda la calidez y el confort de la tumba.
Raza | Dios |
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Lugar de Nacimiento | Kaldheim |
Periodo Histórico | Desconocido |
Historia
Egon es uno de los Skoti más viejos, pero envejece hacia atrás. Tiene la apariencia (y la actitud amarga y negativa) de un adolescente. Cáustico y pesimista, predice constantemente la caída de los Skoti. Debido a su rostro juvenil, los otros dioses a veces no lo toman en serio, lo que es una fuente de amargo resentimiento para él. Él cree que los Skoti están más ocupados con pequeñas disputas que en gobernar los reinos y cree que su caída es inminente, probablemente a manos de los elfos. Kolvori comparte una preocupación similar, pero los dos dioses son demasiado diferentes para llevarse bien.
Durante la guerra de los Skoti con los Einir, Egon engañó al Rey Narfi, el rey de Karfell, para que le diera el control de un ejército de muertos. Este espeluznante regalo cambió el rumbo de la batalla a favor de los Skoti. En honor a esta hazaña, se convirtió en dios de todos los muertos y pasa la mayor parte de su tiempo en Istfell entre los espíritus de los caídos. Ahora se proclama a sí mismo el Señor Supremo Gobernante de las Tierras de Istfell y de los muertos de Todos los Reinos, aunque incluso él rara vez puede hacer que sus espíritus residentes hagan algo debido a su continua apatía.
Durante eones, Egon ha intentado forzar su entrada en Starnheim, sin recibir el juicio necesario que le permitirá o no entrar en ese reino. En todos los intentos de invadir Starnheim, Egon es detenido por Firja y el espíritu guerrero Ranar (designado por la valquiria como guardián del paso entre Istfell y Starnheim). Este ciclo se ha repetido durante siglos.
Curiosidades
- Egon se basa en Hela, la gobernante nórdica de los muertos. Sin embargo, a diferencia de la diosa nórdica, Egon es hombre y envejece hacia atrás, mientras que no se sabe si Hela envejezca o si ya está medio muerta.
- Egon es un nombre ordinario (aunque anticuado) en alemán y otros idiomas de Europa Central y del Norte. Se deriva de la palabra raíz del antiguo alemán egg (“filo”, como en una hoja) o “agi” (“terror”).
- El trono de Egon es una referencia a Hlidskjalf, el alto asiento de Odin que el dios usaba para observar todos los reinos.